Ante la situación de violencia vivida en Tierra Santa, toda la Comunidad Educativa San Ignacio se ha sumado a la convocatoria del patriarca de Jerusalén, para llevar a cabo una jornada de ayuno y oración.
Con un sencillo pero emotivo acto, católicos, judíos y musulmanes elevaron sus oraciones en la capilla del Colegio, donde quedó patente todo lo que nos une independientemente a la nacionalidad, la etnia o la fe.
«La fraternidad no es una utopía, debemos ser artesanos de la paz» rezaba la comunidad el pasado martes.